Los farmacéuticos, ayer y hoy

25/09/2017

Medicamenta non mella: ‘los medicamentos no son miel’. Esta sencilla frase, atribuida a Plinio el Viejo y convertida posteriormente en lema de la Real Academia de Farmacia, define el trabajo y pasión de los farmacéuticos desde su origen: conocer en profundidad los medicamentos para garantizar su correcta fabricación, almacenamiento y dispensación.

Con motivo del Día Mundial del Farmacéutico, queremos hacer un pequeño guiño a los más de 70.000 farmacéuticos colegiados que hay en nuestro país y, en especial, a los más de 60 que trabajan en Kern Pharma.

 

Un poco de historia: la farmacia desde sus inicios hasta hoy

Los orígenes de la farmacia se mezclan de forma inseparable con los de la medicina y otras ciencias como la química o la biología. Por ello, no es posible determinar quién fue el primer farmacéutico de la historia, ya que cada cultura antigua tuvo sus diferentes tipos de sanadores. De esta forma, grandes personajes como Hipócrates, Dioscórides o Galeno se consideran médicos-farmacéuticos.

Durante la Edad Media destaca la aportación de los musulmanes, que introducen en España conceptos ya puramente farmacéuticos, como la destilación o los albarelos: los típicos recipientes utilizados en farmacia para guardar cualquier extracto, tanto vegetal como animal, usado para preparar medicamentos. En la fotografía que encabeza este post se pueden ver los albarelos colocados en la fila superior.

Es en los siglos XVII y XVIII cuando el farmacéutico se diferencia más claramente de otros profesionales y se dedica casi en exclusiva a descubrir y estudiar, desde un aspecto químico, nuevos fármacos. Prueba de esta diferenciación es que en la España de Felipe V, en 1737, se aprueban los estatutos del Real Colegio de Boticarios de Madrid para que se dedicase al “cultivo y adelantamiento de la Farmacia, Química, Botánica e Historia Natural”.

En el siglo XIX se vuelve obligatoria la colegiación de los farmacéuticos en España. La universidad española en ese momento se estructuraba en cinco facultades entre las que estaba la de Farmacia, a pesar de que sólo existían cuatro centros: Madrid, Barcelona, Granada y Santiago de Compostela. En esa época apenas se licenciaban 300 personas. Por esos años se hacen grandes avances en medicina que permitieron también evolucionar a la farmacia: aparecen infinidad de fármacos (como los derivados del ácido acetilsalicílico) y tecnologías que permiten preparar los medicamentos con nuevas formas farmacéuticas, como cápsulas o inyectables.

Hasta la primera mitad del siglo XX, la producción industrial de medicamentos era muy limitada. Los farmacéuticos se dedican principalmente a elaborar fórmulas magistrales a medida que los médicos prescriben. Hacia la segunda mitad, la producción industrial despega y el sector farmacéutico experimenta un gran desarrollo, asemejándose más a lo que conocemos hoy en día: aparecen muchos medicamentos de uso común, como los antibióticos de uso oral, los antihistamínicos o los anestésicos.

 

El farmacéutico, un actor crucial en la salud de la sociedad

El farmacéutico es el verdadero especialista del medicamento y desarrolla su labor en muchos ámbitos de actuación. Quizás el más conocido es el de las farmacias, en las que trabajan casi 50.000 de los 70.000 colegiados que hay en España. En este sentido la farmacia se ha convertido en un centro asistencial de primera necesidad al que las personas acuden para hacer consultas de salud. El farmacéutico se complementa así con otros profesionales, como médicos y enfermeros, para brindar a las personas una atención sanitaria integral. Por su formación, en las farmacias se suelen llevar a cabo labores tales como:

  • Atender, informar y hacer seguimiento de tratamiento y enfermedades. También vigila los posibles efectos adversos de los medicamentos.
  • Fabricar medicamentos, como fórmulas magistrales o preparados oficinales, adaptados a las necesidades de cada paciente.
  • Promocionar hábitos de vida saludable y participar en campañas sanitarias.
  • Realizar análisis clínicos: como el nivel de colesterol y glucosa, o toma de la tensión arterial.

Pero su labor no acaba aquí, sino que se desarrolla en muchos otros ámbitos asistenciales, tal y como explica el Consejo General de Farmacéuticos en este vídeo. Por ejemplo, en la investigación y la docencia, en el cuidado de la salud pública y las alertas sanitarias, en  la dispensación de medicamentos en los hospitales –farmacia hospitalaria-, en la distribución de los medicamentos o en la realización de pruebas analíticas.

Desde Kern Pharma queremos felicitar a toda la profesión farmacéutica por el conocimiento, dedicación y pasión mostrados en la gran labor de atender la salud de la población. ¡Feliz día, farmacéuticos!