Insuficiencia venosa, cuando las piernas se cansan

1 de cada 4 españoles sufre insuficiencia venosa, y más de la mitad son mujeres. Aunque esta afección no siempre es grave, puede perjudicar la vida cotidiana. Conocer los síntomas y las formas de prevenirla pueden ayudar a tener una vida más saludable.

¿Qué es la insuficiencia venosa?

La insuficiencia venosa es la dificultad que tienen las venas de las piernas para llevar la sangre desde estas extremidades hasta el corazón. Las venas pierden elasticidad y se deforman, lo que dificulta la circulación de retorno, provocando que la sangre se acumule en las piernas y ocasione inflamación.

El corazón bombea sangre con el fin de que lleguen nutrientes y oxígeno a todas las partes del cuerpo para que puedan funcionar correctamente. Cuando la sangre llega al final de las piernas debe volver al corazón para ser renovada, pero en el caso de sufrir insuficiencia venosa se dificulta este flujo de retorno de la sangre. Las venas de las piernas son elásticas y poseen válvulas que impiden que retroceda la sangre que vuelve al corazón. Cuando las venas se dilatan, estas válvulas pierden su función, por lo que la capacidad de bombeo disminuye y se produce la insuficiencia venosa.

Síntomas de la insuficiencia venosa

Los principales síntomas son:

• Aparición de varices y pequeñas venas azuladas debido a la pérdida de elasticidad de las venas.
• Dolor, pesadez de piernas y cansancio.
• Picor y hormigueo en las piernas.
• Calambres musculares.
• Inflamación, principalmente en los tobillos.

Esta patología es conocida comúnmente como el “mal de las piernas cansadas”, ya que el dolor, la pesadez y los calambres, son síntomas que generan un cansancio extremo, como si el afectado corriera una maratón todos los días.

Causas de la insuficiencia venosa

No siempre hay una causa específica, pero existen hábitos poco saludables, así como factores de riesgo que contribuyen a que aparezca:

• Edad: es el principal factor de riesgo. Con la edad se producen cambios estructurales en la pared venosa que facilitan el mal funcionamiento de las válvulas de retorno venoso.
• Sexo:es el segundo factor en importancia. La insuficiencia venosa predomina en las mujeres.
• Peso:aquellas personas con sobrepeso u obesidad tienen mayor riesgo de padecer insuficiencia venosa.
• Llevar una vida sedentaria: sin ejercicio y cuando se permanece de pie o sentado largos períodos de tiempo.
• Hábitos no saludables: beber alcohol o fumar.
• Otras causas pueden estar relacionadas con el estreñimiento, el embarazo, o la menopausia.

Tratamiento de la insuficiencia venosa

En la actualidad, la insuficiencia venosa no tiene cura, por lo que los tratamientos son preventivos y sintomáticos, para evitar los factores de riesgo y mejorar los síntomas:

• Postura: es aconsejable elevar las piernas para favorecer la circulación de la sangre. Durante la noche, es mejor dormir con las piernas elevadas unos 15 centímetros. Realizar drenaje linfático (debe hacerlo un profesional) y hacer sesiones de hidroterapia que combina las duchas con agua fría y masajes también puede ayudar.
• Medidas compresivas: la compresión elástica disminuye el diámetro de las venas, favoreciendo el retorno venoso. Mejoran los síntomas, reducen el edema y retrasan la evolución de la insuficiencia venosa. Están indicadas para todas las personas con problemas venosos excepto en aquellos con isquemia, fallo cardíaco y flebitis. La terapia de compresión puede ser elástica, pero también inelástica o de compresión. Siempre consultar con un profesional.
• Tratamiento farmacológico y fitoterápico: el uso de medicamentos y complementos alimenticios a base de plantas, tienen como objetivo aliviar los síntomas y disminuir la inflamación edema (acumulación de líquidos bajo la piel) que se puede ocasionar con la insuficiencia venosa. Kern Pharma comercializa medicamentos que contienen biflavonoides como la diosmina, cuyo fin es mejorar la sintomatología asociada a la insuficiencia venosa.
• Tratamiento tópico: el tratamiento tópico de la insuficiencia venosa es de amplia utilización, los geles con efecto frío, pueden aliviar el dolor. 
• Escleroterapia: consiste en la inyección intravenosa de una sustancia irritante para producir una lesión controlada de manera que se cierre la vena. Esta técnica va asociada a compresión elástica.
• Cirugía: la técnica quirúrgica se utiliza en el caso de varices evolucionadas o con complicaciones.

También, es recomendable seguir estas indicaciones:

• Evita permanecer sentado o de pie por períodos de tiempo muy prolongados. Si no tienes opción, puedes mover ligeramente las piernas de manera periódica o caminar al menos un minuto cada hora.
• Evitar el sobrepeso y la obesidad.
• Hacer ejercicio con regularidad para mejorar la circulación. Caminar al menos media hora al día, o montar en bicicleta.
• Usar medias de compresión para mejorar el flujo sanguíneo en las piernas.
• Alimentación: evitar los fritos, dulces, alcohol y el consumo excesivo de sal.
• No permanecer mucho tiempo en ambientes con alta temperatura.
• Evita la ropa o el calzado muy ajustado como cinturones, pantalones apretados o botas, y los tacones altos o los zapatos totalmente planos.

La insuficiencia venosa no es algo grave, pero sí puede influir negativamente en la calidad de vida. Para no dejar que eso ocurra, es recomendable consultar al médico cuando haya síntomas y tratar de prevenir los factores de riesgo.