El dolor en tiempos de teletrabajo

El teletrabajo se ha convertido en una realidad para muchos este 2020. Tanto es así que, de acuerdo con datos publicados por la consultora norteamericana Oliver Wyman, el 63% de los españoles que están teletrabajando actualmente cuentan con seguir haciéndolo en un futuro y establecer esta como su nueva normalidad.

Aunque trabajar en remoto puede tener muchas ventajas, también tiene algunos inconvenientes. Uno de ellos son las dolencias, principalmente musculares, que pueden aparecer por malas posturas o por no disponer de un espacio de trabajo adecuado. Normalmente, se trata de dolores cervicales o dolor lumbar, aunque pueden derivar también en cefaleas tensionales u otras dolencias similares.

¿Qué son los dolores musculares?

Los dolores musculares pueden involucrar más de un músculo e incluso ligamentos y tendones. El origen de estas dolencias suele estar relacionado con tensión, sobrecarga o lesión muscular por un ejercicio o un esfuerzo que sean físicamente exigentes.

Aun así, este tipo de dolor también puede aparecer a causa del estrés, que hace que nuestro cuerpo genere una serie de hormonas que tensan los músculos y que aumentan la sensibilidad al dolor. Además, una mala postura puede añadir tensión y requerir un esfuerzo muscular que generará también dolor posteriormente.

¿Qué hacer para evitar dolor muscular a la hora de teletrabajar?

Hay algunas recomendaciones generales en las que coinciden tanto médicos como fisioterapeutas, que pueden ayudar a evitar, o al menos mitigar, las posibles dolencias causadas por el teletrabajo. Son 3 consejos básicos:

1. Hacer ejercicio moderado para fortalecer la musculatura. Especialmente la de las zonas dorsal, lumbar y cervical. También es importante realizar algunos estiramientos para tonificar el cuello, los brazos, la región lumbar e incluso las piernas, ya que nos ayudarán a reactivar los músculos y evitar dolores. Ejercicios como el yoga o el pilates suelen ayudar a hacer estos estiramientos y a fortalecer la musculatura.
2. Hacer descansos de entre 5 y 10 minutos cada 45 o 50 minutos trabajados para moverse un poco. De este modo no solo descansaremos la vista, además estiraremos las piernas y cambiaremos de postura. Y ¿por qué es importante cambiar de postura tan a menudo? Porque de este modo, si habíamos adoptado una que pudiera resultar perjudicial para nuestros músculos, la modificaremos antes de que llegue a causar un problema.
3. Mantener una buena postura a la hora de trabajar: trasero en el asiento, espalda en el respaldo y pies en el suelo. Es muy importante trabajar en una mesa, aunque no sea un escritorio en sí, y sentados correctamente en una silla. En definitiva, debemos evitar trabajar desde un sillón, un sofá o incluso desde la cama, con el ordenador en las piernas.

¿Cómo tratar el dolor causado por el trabajo en remoto?

Hay veces en que las recomendaciones llegan tarde o en las que, simplemente, el entorno y las circunstancias no permiten llevar a la práctica los consejos que nos evitarían o mitigarían el dolor. En estos casos, y siempre que se trate de un dolor leve, podemos recurrir a medicamentos que no requieran receta médica.

Es importante consultar siempre al farmacéutico antes de comprarlos y seguir las instrucciones del prospecto. En caso de no conocer el origen del dolor, o si este persiste durante varios días, se deberá acudir al médico.

Teniendo todo esto en cuenta, Dolostop® Plus 500mg/150mg es uno de los fármacos que nos pueden ayudar a combatir este tipo dolencias. Este medicamento sin receta está indicado para el tratamiento sintomático ocasional del dolor leve a moderado en adultos.  Se trata de la primera y única combinación de paracetamol e ibuprofeno que se comercializa en España. Esta combinación en un único comprimido hace que ambos principios activos actúen de forma sinérgica.

Dolostop® plus no debe administrarse en caso de úlcera gastroduodenal. En caso de que el dolor persista durante más de tres días, se debe acudir al médico.