Las 5 enfermedades urológicas más frecuentes

Los trastornos urológicos incluyen las infecciones urinarias, la prostatitis, los cálculos renales, la incontinencia urinaria y la insuficiencia renal, entre otros. El sistema urológico es el responsable de eliminar los desechos del organismo mediante la orina, por lo que una alteración de este puede dar lugar a infecciones y daños en el tracto urinario y reproductivo.  

Según un estudio realizado por la Asociación Española de Urología, en torno al 12% de la población en España sufre trastornos urológicos, siendo los hombres y los mayores de 65 años los grupos con mayor incidencia. En lo que respecta a las enfermedades más frecuentes, el informe establece que la infección de las vías urinarias representa el 30% de los casos, mientras que la presencia de cálculos renales se detecta en el 15% de las visitas médicas. 

1. La infección urinaria y la cistitis: un problema recurrente 

La enfermedad urológica más habitual es la infección urinaria, y más concretamente la cistitis. Esta patología consiste en la inflamación de la vejiga debido a la presencia de bacterias, que se alojan y prosperan en las paredes de la uretra y la vejiga.  

Las infecciones urinarias afectan mayormente a las mujeres, debido a la anatomía más corta de su uretra y a la menor distancia que existe entre esta y el esfínter. Las relaciones sexuales, junto al uso de tampones, espermicidas y anticonceptivos de barrera como el diafragma, favorecen la entrada de bacterias en la zona. Los cambios hormonales, la menopausia y un sistema inmunitario debilitado, por su parte, también pueden propiciar su aparición. 

Para su prevención es clave mantener una buena higiene de la zona genital, para lo que existen geles de higiene íntima adaptados incluso a las pieles más sensibles. En Kern Pharma tenemos productos específicos para la higiene íntima como Melagyn gel y Melagyn Mousse, especialmente formulados para limpiar suavemente la zona íntima y calmar el picor.  

Por otro lado, también se recomienda orinar justo después de mantener relaciones sexuales, beber un mínimo de dos litros de agua al día, mantener una dieta equilibrada y evitar aguantarse las ganas de ir al baño. 

Finalmente, y si sospechas que sufres una infección urinaria, es importante conocer sus síntomas principales: 

• Necesidad constante de orinar. 

• Sensación de quemazón al orinar. 

• Orina que sale en pequeñas cantidades, con un color turbio y olor fuerte. 

• Presencia de sangre en la orina. 

• Dolor alrededor del hueso pélvico. 

• Fiebre leve. 

2. La prostatitis en hombres 

Se trata de la enfermedad urológica responsable de la inflamación en la glándula prostática, un órgano del tamaño de una nuez y que rodea la uretra. Según un estudio, se calcula que hasta 145.598 hombres padecen prostatitis en España. 

Esta patología suele estar causada por infecciones bacterianas, vinculadas a las enfermedades de transmisión sexual o a la proliferación de la bacteria E. coli, presente en el tracto intestinal. También puede originarse a partir de afecciones previas en la uretra o la próstata, como es el caso de la fimosis y las lesiones en el perineo. 

​​​En la prevención de la prostatitis se recomienda seguir unas medidas de higiene básicas, tales como lavarse las manos antes y después de orinar. También es aconsejable el uso del preservativo durante las relaciones sexuales, así como el seguimiento de una dieta abundante en antioxidantes y grasas polisaturadas, que incluya alimentos como los frutos rojos y limite las comidas picantes. 

Los síntomas que indican un caso de prostatitis son: 

• Sensación de ardor al orinar. 

• Necesidad frecuente de ir al baño, acompañada de dificultades en la micción. 

• Orina turbia o con sangre. 

• Dolor durante la eyaculación. 

• Fiebre, escalofríos y dolor muscular generalizado. 

• Dolor en la ingle, el abdomen o las lumbares. 

• Incomodidad en los testículos. 

3. Cálculos renales o piedras en el riñón 

Los cálculos renales, a menudo conocidos simplemente como piedras en el riñón, son depósitos de sales y minerales que se acumulan en este órgano mediante la cristalización de los componentes presentes en la orina. Entre sus causas se encuentra el consumo insuficiente de agua, a menudo acompañado de una ingesta excesiva de proteínas, sal y azúcar.  

Los cálculos renales son un fenómeno relativamente frecuente, que el cuerpo elimina automáticamente a través de la micción hasta un tamaño de unos 5 milímetros. Pero ante piedras de mayor tamaño es necesario seguir un tratamiento médico y, en el peor de los casos, realizar una cirugía. Las molestias asociadas a esta patología aparecen cuando la piedra se desplaza hacia los uréteres, lo que provoca un bloqueo en el flujo de orina e hinchazón en el riñón.  

Los síntomas que indican la existencia de cálculos renales son: 

• Dolor agudo en la espalda o en el costado, debajo de las costillas. 

• Sensación de ardor al orinar. 

• Necesidad constante de orinar y micciones en pequeñas cantidades. 

• Orina con mal olor, turbia o con sangre. 

• Náuseas y vómitos. 

• Fiebre y escalofríos. 

4. La insuficiencia o incontinencia urinaria 

La insuficiencia urinaria se manifiesta como una pérdida involuntaria de orina. Se estima que afecta a 6 millones de personas en España, una cifra que asciende hasta los 400 millones de personas en todo el mundo.  

Esta enfermedad urológica es consecuencia del deterioro de los músculos del tracto urinario, que pierden firmeza por causas como la edad y el envejecimiento, el embarazo y el parto, la menopausia, los problemas de próstata y ciertos trastornos neurológicos, puesto que pueden alterar las señales nerviosas que controlan la vejiga.  

La incontinencia urinaria también se origina por problemas de salud vinculados a la diabetes, el sobrepeso, el tabaquismo y el estreñimiento prolongado, por lo que realizar algunos cambios en el estilo de vida ayudará a su prevención. Beber suficiente agua, hacer deporte, mantener un peso saludable, evitar el tabaco y el alcohol e ingerir más fibra son un buen punto de partida, que puede complementarse con la realización de ejercicios específicos para reforzar los músculos del suelo pélvico. 

Los síntomas que indican la existencia de este problema urológico son: 

• Pérdida de orina ante el esfuerzo, como por ejemplo al estornudar, toser, reír o mover algo pesado. 

• Pérdida de orina por urgencia, que sucede tras una necesidad fuerte y repentina de orinar. 

• Pérdida de orina por rebosamiento, o la sensación de que la vejiga no se vacía completamente y genera un goteo constante. 

• Pérdida de orina por incontinencia funcional, cuando existe una discapacidad física (como la artritis) o mental (como el Alzheimer) que impide llegar a tiempo al baño. 

5. La insuficiencia renal: una afección de los riñones 

Los riñones son los encargados de eliminar el exceso de líquido, minerales y toxinas de la sangre, además de producir hormonas que estimulan la producción de glóbulos rojos y mantienen la salud de los huesos. La alteración de estas funciones provoca la acumulación de residuos en la sangre, dando lugar a un caso de insuficiencia renal.  

Las causas de la enfermedad están vinculadas a problemas en la circulación de la sangre hacia los riñones, así como a las lesiones previas en este órgano y al uso de tubos de drenaje de orina, puesto que obstruyen el proceso natural de eliminación de desechos. La edad avanzada, la diabetes, la presión arterial alta, las enfermedades renales y hepáticas y algunos tipos de cáncer también son considerados factores de riesgo en el desarrollo de una insuficiencia renal. 

Para prevenir esta enfermedad urológica, los médicos recomiendan mantener un estilo de vida activo y una dieta equilibrada, leer siempre el prospecto de los analgésicos de venta libre y evitar el uso abusivo de medicamentos que dañen los riñones.  

Si sospechas que puedes estar sufriendo un caso de insuficiencia renal, presta atención a los siguientes síntomas: 

• Retención de líquidos, junto a la hinchazón de piernas, tobillos y pies. 

• Disminución de la cantidad de orina al miccionar. 

• Somnolencia, fatiga y falta de aire. 

• Náuseas y desorientación. 

• Ritmo cardíaco irregular. 

• Sensación opresiva en el pecho. 

• Hematomas y sangre en las heces. 

En Kern Pharma somos especialistas en el tratamiento de enfermedades renales y urológicas. Nuestro vademécum incluye medicamentos con y sin prescripción médica, pensados para atender una amplia variedad de patologías desde una posición de profesionalidad y eficacia.