Sistema inmune: Qué es y cómo reforzarlo en niños y adultos

14/03/2022

Vivimos expuestos a numerosos microorganismos. Por eso, el sistema inmune, también conocido como inmunitario, es tan importante. Es nuestra defensa y nos ayuda a detectar y neutralizar las amenazas que llegan del exterior, como es el caso de los virus y bacterias. Sin embargo, factores como los cambios de rutina, una mala alimentación o la falta de sueño pueden debilitarlo. Por eso es importante saber cómo fortalecer el sistema inmune. 

Qué es el sistema inmune 

El sistema inmune es una red compleja compuesta por células, tejidos y órganos que ayuda a combatir infecciones y otro tipo de enfermedades. Lo hace protegiendo nuestro cuerpo de patógenos externos, como las bacterias o los virus.   

Son varios los sistemas y órganos del cuerpo humano que trabajan para conseguir una respuesta inmunitaria a estos agentes externos. Cada uno de ellos tiene una función específica: 

  • La piel y las mucosas. Son la primera barrera que protege el organismo de los agentes patógenos. 

  • Ganglios linfáticos. Ubicados en todo el cuerpo, se localizan de manera más abundante en axilas, cuello, abdomen e ingles. Actúan como filtradores de la linfa, un líquido claro pobre en proteínas y rico en lípidos y glóbulos blancos. 

  • La médula ósea. Es el tejido en el que se forman los glóbulos rojos y blancos. 

  • El timo. Se trata de una glándula situada encima del corazón y una de las estructuras inmunológicas más importantes. Tiene la función de sintetizar los linfocitos T, un tipo de glóbulos blancos que ayudan a reconocer a los patógenos. 

  • El bazo. Es una estructura que también forma parte del sistema linfático. Ubicado al lado del páncreas, es el encargado de producir los anticuerpos específicos para cada antígeno. 

Cómo reforzar el sistema inmune en adultos 

Debido a la importancia que el sistema inmunológico tiene para nuestro buen estado de salud, es de vital importancia saber cuidarlo. Algo que hay que tener todavía más presente en ciertas épocas del año, como el invierno, cuando estamos más expuestos a elementos como el frío y la humedad y a personas con patologías como gripes y resfriados. Además, disfrutamos de menos horas de sol, lo que contribuye a empeorar el déficit de vitamina D. Por eso, hay diferentes consejos que puedes aplicar para ayudar a tu sistema inmunitario a seguir realizando su función: 

  • Descansar bien. Algo tan simple como dormir bien todas las noches tiene un impacto positivo en tu sistema inmune. Dormir entre siete y ocho horas, puede contribuir a que las células del organismo, entre ellas las del sistema inmune, se regeneren. Además, es importante intentar establecer un horario de sueño. 

  • Hacer ejercicio físico. Es recomendable hacer ejercicio de manera regular, pues ayuda a reducir el estrés y evitará que tus defensas se debiliten. Una buena alternativa son los deportes aeróbicos, como montar en bicicleta o nadar. Practícalos de forma moderada, pero dedica al menos 20 o 30 minutos al día. 

  • Seguir una dieta equilibrada. La alimentación es vital para reforzar el sistema inmune. Si es inadecuada o insuficiente se puede producir una caída en las defensas. Lo más importante es que sea variada, ya que con ello conseguirás todos los nutrientes que necesitas para garantizar el equilibrio interno. La vitamina A, por ejemplo, tiene un papel importante en la maduración y diferenciación de las células. Algo similar sucede con la vitamina D.  

Ayudar a los niños a reforzar el sistema inmune 

Igual que para los adultos, en los niños resulta fundamental contar con un sistema inmune fuerte. También los más pequeños necesitan disfrutar de un buen descanso, realizar actividad física moderada y contar con una alimentación equilibrada y rica en vitaminas. Además, hay ciertos consejos que les pueden ayudar mientras están creciendo: 

  • Lactancia materna. La leche materna es muy rica en inmunoglobulinas y leucocitos, por lo que proporciona una inmunidad activa a los bebés. La OMS recomienda mantener la lactancia materna hasta los seis meses de forma exclusiva y, complementada con otros alimentos, hasta los dos años de edad. 

  • Realizar actividades al aire libre. Realizar ejercicio físico en el exterior tiene un beneficio extra. Y es que, gracias a la exposición solar los pequeños podrán satisfacer parte de las necesidades de vitamina D. 

  • Vacunación. Es importante seguir el calendario de vacunación, pues es la mejor manera de prevenir algunas enfermedades graves. 

  • Añade probióticos a su dieta. Consumidos en cantidades adecuadas estos microorganismos vivos son vitales para equilibrar la flora intestinal. Esto ayuda a evitar que se desarrollen bacterias patógenas y mejora la protección del tejido intestinal. Los probióticos se encuentran en alimentos como los yogures naturales no azucarados, el queso crudo o el kéfir. 

Otra forma de ayudar al sistema inmune en adultos es utilizando complementos alimenticios que cuenten con vitaminas que nos ayuden a protegerlo. Es el caso de Revidox ADN, que gracias a su contenido en vitaminas C, selenio y zinc, ayuda a proteger tu sistema inmune y a mejorar tu estado de ánimo y vitalidad.